Por Luis Martínez Alcántara
El presidente francés, Emmanuel Macron, anunció un ambicioso plan de renovación para el Museo del Louvre, con una inversión estimada de hasta 800 millones de euros. Este proyecto, denominado “Renacimiento del Louvre”, tiene como objetivo modernizar las instalaciones y mejorar la experiencia de los visitantes.
Una de las principales novedades es la creación de una sala exclusiva para la Mona Lisa, la obra maestra de Leonardo da Vinci, que permitirá una apreciación más tranquila y ordenada de la pintura.
Además de la nueva sala para la Mona Lisa, el plan incluye la construcción de una nueva entrada en la fachada oriental del museo, cerca del río Sena. Esta medida busca descongestionar la actual entrada de la pirámide de cristal y facilitar el acceso de los visitantes. También se prevé la creación de salas subterráneas y la modernización de las instalaciones para cumplir con los estándares actuales de conservación y sostenibilidad.
La financiación de este ambicioso proyecto provendrá de diversas fuentes. Se contempla un incremento en el precio de las entradas para los visitantes extracomunitarios, así como aportaciones del Ministerio de Cultura francés. Además, se buscará el apoyo de mecenas y se utilizarán fondos provenientes de la filial del Louvre en Abu Dabi.
La finalización de las obras está prevista para el año 2031, con el objetivo de garantizar la preservación del patrimonio cultural y mejorar la experiencia de los millones de visitantes que recibe anualmente el museo.
Esta renovación responde a la necesidad de abordar problemas de mantenimiento y conservación que el museo ha enfrentado en los últimos años. La directora del Louvre, Laurence des Cars, había señalado previamente deficiencias como filtraciones de agua y variaciones de temperatura que ponían en riesgo la integridad de las obras de arte. Con esta remodelación, se busca asegurar que el museo cumpla con los estándares modernos y continúe siendo un referente cultural a nivel mundial.
El anuncio de esta millonaria remodelación ha generado expectativas tanto en la comunidad artística como entre el público general. Con esta iniciativa, Francia reafirma su compromiso con la conservación y promoción de su patrimonio cultural.